jueves, 26 de febrero de 2009

DE PLUMAS A ESCAMAS...

Dedicado a Milo Gasa, a quien sigo con una conspicua dedicacion, y quien por un comentario me motivo a confesar que en algun momento todos somos viboras letales, y sin verguenza esto hace parte de nuestro mejor encanto! ; )

En el balcón del piso 12, con vista a los frondosos farallones que circuncidan la ciudad de Cali, estaban sentados: Felipe, su noviecito (en adelante Fiona), la Geisha, Parra, Gus, José y Santiago (estos dos últimos los anfitriones). La bienvenida fue cordial, hasta 2 besos en la mejilla recibí lo cual me pareció apresurado para el extraño que era yo ante este consolidado e inasequible grupo de tertulias de mi amigo Felipe. Sentado justo en medio, en frente de mi amigo para tener contacto visual y apoyo a solo dos metros de distancia, a mi lado estaba Gus.
Gus, de 35 años, medico, es de esas locas insoportables, beata irrefutable, de esas maricas que la rumba les parece superficial, que ninguna película es buena, que todas las reinas de Colombia no merecen su trono, que Shakira le parece impostada, que odia los saunas, que odia el semen y su pegajosa textura, que probablemente meta en un autoclave una verga antes de chuparla, que se hace lavados a diario para sentirse pulcra, es blanco, traslucido porque por supuesto el sol es el enemigo numero uno de su porcelanada piel de diva de los 50´s, es simpático a primera vista, pero totalmente desagradable justo 30 segundos después de hablar y lo peor, piensa que es la mejor medico y a su vez mejor amiga. A mi otro lado estaba Parra, de 28 años, regordete medico, serio, voz gruesa y una nariz tan criolla, como el tamal. Aunque sus detractores dicen que el mismo es un tamal, pues a pesar de sus rolliza anatomía se enfunda en camisas por lo menos una talla y media menos a la que honestamente le debería corresponder. De carácter rígido, deshonesto en su hablar. Sin embargo su sonora risa es más contagiante que la varicela. Alardea mucho sobre sus “supuestos” éxitos amatorios con pares afectivos de un estilo sofisticado y sobre un recalcitrante rol sexual que trata de aclarar en fallidos intentos con pobre retorica, podría sospechar que hay algo en él, del comediante venezolano que en sus tiempos libres hace las veces de mandatario. Al diagonal izquierdo, Santiago, de 36 años, la Reina del Hogar, medico de profesión pero diva por convicción, clase, distinción, un fenotipo europeo, delgado, alto, de tez blanca, un arrollador cruce de piernas como dos raíces de un manglar, movimientos finos de sus manos, parpadeo mesurado y autor de la decoración de su hogar, honestamente amable, conocedor de su posición en el grupo, y afecto a Fiona, podría decir que ve en Fiona a una hija, una protegida, una sucesión. Santiago es un excelente anfitrión, pero sobre todo un eterno enamorado de su esposo, José.



José, 32 años, medico, atractivo, audaz, con un tono y una textura particular de su voz, algo descuidado, con un temperamento apagado típico de los payaneses, blanco, cabello despeinado. Con la seguridad que dan los años, pero algo inmaduro en sus apreciaciones, bebedor incansable, poco anfitrión (para eso esta Santiago), homosexual de closet en todos los ámbitos, menos esa tarde. Con una inhabilidad auto reconocida para combinar colores y vestirse apropiado, como asesorado la mujer de turbante que tanto odiamos en nuestro país. La Geisha, 43 años, de espíritu arrebatador, rebelde, siempre empleando el genero contrario al masculino para hablar en primera persona, alto, delgado, de una respingadísima nariz lograda a pescozones quirúrgicos (al parecer varios), ojos tan rasgados como dos puñaladas en un cuero de piel de vaca procesado en las expertas talabarterías del Sur del País, conocedor de muchas culturas por su trabajo, de una agilidad mental impresionante y por su puesto, el mas experimentado en los placeres amatorios. De hecho, en medio de la reunión se levantaba y seguía el chat pendiente con un “pollo-rata” que tenia planillado por si las moscas para la noche. La geisha es altiva, arrogante y con una ceja tan levantada que hacia pensar que María Félix era facialmente inexpresiva. Mi amigo Felipe, 30 años, musculado, inteligente, atractivo, con un culo impresionante, serio, un buen partido, desinhibido, arrogante, pecas infinitas en su dorso trigueño, de gustos musicales y exquisito tino literario, filosofo empedernido, amante de la buena cocina. Aunque no somos el uno para el otro, siempre ha habido una tensión afectiva, siempre hemos demostrado una admiración mutua. Fiona, 25 años, nacido en Phoenix –USA-, cachetón como un hijo entre la mujer enturbantada y el comediante mandatario, velludo, serio, pequeño, sin cintura, con apariencia de regordete pero sin serlo, cabezón y de cabello hirsuto y sin brillo. Obviamente es el némesis del suscrito, pero esa animadversión ha sido generada por él mismo, pues en las pocas ocasiones en que supo de mi, fue por boca de su novio, mi amigo, y él ( es probable que apropósito) le habló de nuestra admiración y deseo frustrado mutuo. Tiene un embrujo especial, es atractivo, es decente (o parece serlo), caprichoso, consentido, y un emprendedor empresario con un envidiable pasaporte azul, que le otorga su nacionalidad.
En la reunión se habló de lo que se tenia que hablar, de política, de la economía mundial, del ultimo miss universo, de la atención mediática de Barak, del conflicto FARC, del trabajo de cada uno, de la locura de Britney, de libros y de amores, por supuesto. Cuando llegó el almuerzo un plato de espagueti a la boloñesa (a lo cual, el suscrito trago entero, pues si decía que odiaba el espagueti, hubiese echado a perder el ritual de iniciación y aceptación… Ah! Por cierto mis queridos lectores, ODIO EL ESPAGUETI, si, existe alguien en el mundo que no le gusta la pasta: YO!), y del cual mentí severamente al decir que estaba delicioso, cuando ni siquiera era capaz de masticarlo por el increíble e inexplicado asco visceral que le tengo a los serpenteantes hilos de pasta; cada uno disfruto de su plato gracias a la mano prodigiosa de Felipe. Luego el coctel con vodka rendido con Smirnof , jugo de mandarina, tres gotas de limón, un poco de azúcar y hielo granizado con un toque de ginebra seco, especialidad inventada por el suscrito como muestra de gratitud; obviamente el único en no recibir fue Fiona, argumentando: “yo, de esos merengues no tomo gracias, prefiero no mezclar, ok.” Y guiño el ojo, como un gesto de complicidad con alguien que lo veía desde otra latitud y al cual no alcanzaba a distinguir desde la cocina. Quedo claro: La guerra estaba declarada. Alabaron la inventiva alicorada, y Fiona solo dijo: “lastima que yo no acostumbre a mezclar, la verdad me gustan las cosas puras, con su esencia original, como mi camisa”… hubo un silencio sepulcral. Pues yo no había notado que Fiona y yo, llevamos la misma camisa American US Regatta, diferenciadas solo por el color de las líneas, la mía azul y la de él, lila; y hago la salvedad en la aclaración, porque al parecer Fiona les hizo saber a todos menos a mi, sobre nuestra fatal coincidencia. Entonces la Geisha dijo: “Pero si tienen la misma camisa, que Divino”. En un tono tan sarcástico como su elevada ceja izquierda. “Yo la compre en NY” dijo Fiona enfático, y yo respondí casi de inmediato: “yo la compre en el Outlet del único, a solo 220 mil y vienen tres, esta con rayas azul, una verde y una lilita igualita (marcando en silabas li-li-ta y señalándole) a esa tuya” y le devolví el guiño a Fiona, el mismo guiño que me hizo sentir como un culo, ahora era su verdugo. Entonces la Geisha dijo: “princesa, te debe salir mas barato ir al Único que comprar la misma camisa en NY, y de mejor calidad” dijo tocando el cuello de mi vilipendiada camisa, y agregó: “ Además no nos vas a decir que la compraste de ultima colección, porque mínimo se demora seis meses para ser Outlet, como la que tiene nuestro nuevo amigo” Y todos sabían que eso había sido Capoeira, para ver quien hacia la mejor maroma y quien quedaba mejor parado, nos habíamos medido el aceite como dicen por ahí.
Un ruido incesante molestaba la agitada intervención, pero le resté atención. Se cambio el tema, y ahora Gus, si el despreciable Gus, tenia un monologo sobre las cualidades benéficas de la sábila y sus cristales mágicos, que para el cabello, que para las arrugas, que para las estrías, que para refrescar los hombros después de un día en la playa bajo la sombrilla, que para blanquear los dientes, que para la suerte y abrir caminos, que para remover manchas de tinta, que para la tos, que para el estrés, que para bajar los niveles de triglicéridos, que para descansar los ojos… hasta que la Geisha interrumpió y dijo: “Ay mija, el día que a la Sábila le dejen de salir chuzos me la meto por el culo para ver si es tan buena como dices”, soltamos la mejor carcajada que teníamos, era innegable, él era el alma de la tarde. Llego la noche, numerosos tragos, y sin embargo seguía ese ruido en bajos decibeles persiguiéndome como un fantasma. Parra habló sobre un paciente con fuertes lumbagos, y cada que se desvestía en su despacho medico, él sentía como su ética profesional se diluía en esos 90 cm de espalda musculosa y pecosa, cada que lo veía sentía que debía anestesiarlo y acariciarlo, sentía unos furtivos arrebatos de pasión. Y entonces se propuso de manera tacita el tema de las debilidades éticas en el trabajo, así poco a poco las historias clínicas, post-operatorias y de incapacidad entre seductores pacientes y este grupo de médicos sensuales, se fue dando. Cuando por aleatoria me correspondió el turno, procedí a confesar que debido a mi perfil profesional, eran reducidos los posibles eventos que dieran pie a eso: Caballos, vacas, toros, ovejas y cabras no eran los personajes para esas cavilaciones, y los ganadero y caballistas siempre eran de un obeso intenso, si, intenso como su coloración roja, por los elevados niveles de su tensión arterial. A menos que fuera hasta la montaña de Brokeback para encontrar un vaquero sexy de ovejas. Mientras algunos reían, otros encontraban intrigante mi profesión, yo seguía perseguido por el sonido que me agobiaba y el cual ahora era mas intenso. Les pareció intrigante escuchar sobre palpaciones para inseminar vacas o palpar potros en gestación, a lo que la Geisha dijo: “ ayyyyyyyyyyyyy (gritando como la sirena de una ambulancia) este es mi hombre, le gusta el Fisting” y con esto una nueva carcajada colectiva. Sin embargo ahí seguía, el sonido intrigante. Pensé en esquizofrenia y en esos ruidos que aparecen en el mundo paralelo de delirios y alucinaciones, pensé en una probable predisposición genética a los trastornos, pensé que me habían drogado con los espaguetis de la muerte, pensé que simplemente Fiona me enviaba maleficios desde su ubicación, ahora justo en frente mío . Cuando Fiona saco su artillería completa, el ruido se hizo mas fuerte, era un siseo, un constante y vibratorio sonido, Fiona arremetió diciendo: “ Pero que lindo, a mi los animales siempre me han encantado, pero como un hobbie como un relajo, pero debe ser difícil ser gay y ganarse la vida en medio de tanta… ósea, estar siempre sucio, sudando…ósea de tanta mierda!”… el silencio fue agudo, como cuando se esta en medio de un movimiento telúrico, y se agudiza el silencio en busca de una razón para correr y buscar refugio. Hice tronar las articulaciones de las primeras tres vertebras de mi columna con un movimiento brusco de mi cabeza, tratando en vano de acomodar mis ideas y reponerme. Le miré de frente a los ojos, buscando una debilidad en esa mirada de ojos grandes y color miel, y el sonido que me perseguía se hizo agudo. La tensión fue menguada por Santiago, quien solicito una tregua a través de un sutil chiste de salón, pero los ánimos estaban caldeados, el publico estaba ansioso y las apuestas ya estaban cerradas.
Entonces se levantaron las alertas cuando Gus, dijo: “Lo mejor para bajar los ánimos es … (yo pensé que diría que la Sábila)… es confrontar las diferencias, al parecer a ti (ósea, yo) te cae mal “Fiona”, o que es lo que pasa?”, a lo cual respondí: “Para nada, yo la estoy pasando divinamente, y tu?” dije preguntándole a Fiona, y respondió: “Regio” pero el blanqueamiento de sus ojos no era consecuente, mientras, el ruido seguía, pero esta vez, se hizo evidente y descubrí de donde provenía: era la vibración furica de un apéndice que se elevaba desde la espalda de Fiona, sobresaliendo, mostrándose intimidante y amenazador, ahí estaba su cascabel corneo en el extremo de su cola y agitado con vigor avisando el peligro que se avecinaba. Su enorme cascabel logrado a cambios continuos de piel durante sus 25 años de edad, lo hacían ver aterrador.

Entonces sus abultados cachetes se redujeron y se segmentaron en triangulares formas, en celdas en formas lanceoladas, en infinitos triángulos cubiertos por una vellosidad magenta, de múltiples tonalidades marrón, sus pupilas se convirtieron en una delgada línea pincelada de color negro, y sacudía frenéticamente su ahora bífida lengua rosada con lila, si, lila como las rayas de nuestra fatídica coincidencia, percibiendo la temperatura del aire, que para ese momento iba en un aceleratriz ascenso. Su cuerpo cambio, menos su cintura, pues seguía ausente en medio de esta maratónica metamorfosis, ahora su cuerpo de una tubular y serpenteante figura, que se recorría en el mismo lugar una y otra vez, reconociendo el campo de batalla. Sus dulces ojos miel, ahora eran unos amenazadores ojos negros que buscaban muerte, sangre y justicia. Por mi parte, ya estaba convertido en un temerario Mapanare de ciento ochenta y tres centímetros de pura fibra colombiana, rodeándome sobre mi mismo, y siseando mi también ahora bifurcada lengua, mi olor a selva húmeda tropical, se mezclaba el olor a desierto gringo, el musgo contra la arena, la lluvia contra el sol, los Siux contra los Chibchas, el Tío Sam contra Juan Valdés, la Cascabel contra el Mapanare, pero en el fondo era el estúpido combate entre clases sociales, cayendo en bajeza del escupitajo en la cara, pero no me iba a quedar con los brazos cruzados.
Rápidamente ambos deslizamos nuestros cuerpos escamados desde nuestras sillas al suelo, erguidos hasta la mitad del cuerpo sobre nuestro poderoso sistema muscular estriado tubular, enfrentados como todos esperaban (y habían planeado), ahí estaba la intimidante, velluda y agresiva Cascabel del Desierto de Arizona, y el aguerrido, valiente y a la defensiva Mapanare del trópico húmedo de Colombia. A nuestro al rededor, la apuestas estaban hechas Santiago convertido en una elegantísima, distinguida y destacada Mamba Negra; José en una simple y común Coral, demostrando aun su imprecisión en la combinación de colores; Parra era una regordeta Pitón Reticulada (o culiada?) enfundada en unas escamas de una talla menos, pues nunca mudaba de piel; Gus era una parsimoniosa, torpe e inofensiva boa albina; mi amigo Felipe mutó a una poderosa Anaconda del amazonas brasilero con el poder de asfixiar cualquier pollo descuidado, y la Geisha, bueno, la Geisha no podría ser otra mas que, La Cobra Real.
Sin embargo antes de enfrascarnos en la batalla a la que el destino nos había convocado, hice una tregua, descanse mi erguido cuerpo escamoso, y deje de mover mi lengua, y dije: “Mira, yo vine aquí a pasarla bien, de verdad, no quiero agresiones, ni caer en la descalificación, ni lastimar tu ego” pero fue en vano, Fiona ya destilaba gotas de veneno desde sus prolongados hacia adelante, colmillos mortíferos mostrados por sus fauces abiertas completamente, y decretó: “Mi Ego jamás, será lastimado y menos por alguien como tu, porque mejor no te vas a lavar la marranera de donde saliste, o a terminar de hacerle la paja al caballo. Nunca te debieron invitar…” Todos quedamos demudados, Santiago Jamás pensó que su heredera se expresaría con tanto ahincó, con tanto desprecio y poca finura; pero con la clase que lo caracteriza dijo: “Mira, de verdad bájale al tono, que te estas pasando y eso en mi casa no se permite”; pero yo ya iba en una trayectoria imparable, había dibujado un “S” y me había impulsado enderezando mi sinuoso y escamado cuerpo e iba directo acelerado hacia el cuello de Fiona, mis dos glándulas ubicadas a cada lado de la cara, se conectaban por medio de un conducto a la base de mis dos criollos largos y huecos colmillos, completamente desplegados desde el interior del paladar, abrí a lo que pude mi boca y proyecte mi maxilar inferior e inserte con desenfreno mis colmillos. Una vez dentro la furia de la musculatura de la mordida había oprimido las glándulas y por primera vez 5 centímetros cúbicos del elixir de mi neurotóxico veneno entraban en su aterciopelado cuerpo, todo esto en unas frases celestiales: “Tu inusual inseguridad te ha dejado como el mas facineroso de los perdedores, Si tu Ego es tan grande, porque sientes que un hombre como yo te erosiona el suelo, te hace sentir débil, acaso no son tus propios miedos los que se apoderan de tu supuesto control, acaso un forajido, casquivano y retrechero Zootecnista te va derrumbar tu imagen de Diva naciente, de Loca Altiva… Déjate de maricadas y sé mas hombre, pero no se le puede pedir mas a lo que la Vida exiguamente te dio…”, para cuando termine de decirlo, mi elixir ya había interferido con los impulsos nerviosos de la peligrosa víbora gringa, ocasionándole una parálisis, su sonajero dejo de vibrar, su lengua se deslizo suavemente por las comisuras labiales de sus intimidantes fauces, y sus ojos, si, esos ojos como pinceladas chinas, se iban apagando, pero aun con la mirada fija puesta sobre mi, sacudí mi cola como un látigo justiciero y desgarre su sonajero, su famoso cascabel, que seria mi trofeo, la señal de mi triunfo, y que luego colgaría en mi cuello cuando regresara a mi forma humana. Pero sacando sus ultimas fuerzas me ataco mordiéndome levemente el dorso, diciendo: “Lárgate hijueputa, mugroso, como mugrosas son tus fotos, si las fotos que todos vimos, y por las cuales estas acá, porque por ninguna otra razón merecías estar aquí”, pero su veneno hemolítico, aquel que destruye los glóbulos rojos y vasos sanguíneos causando hemorragias típico de las Cascabeles, no me hacia daño… cuando me levante en mi forma humana, saque de mi bolsillo un frasco de 10 cc del Antiofídico contra Crotalus que me había inyectado en el baño, y se lo tire en su cara paralizada.
Han pasado dos años desde aquel ofídico combate, hasta ayer, que de regreso en un vuelo internacional con conexión BOG-CLO, cuando yo sentado en clase ejecutiva (no por una neo excentricidad económica, si no por un error a favor en la facturación y pago del impuesto, que me sacaron de la mazmorra de económico y para el cual ya venia preparado con un coctel de sonminefros, almohadillas, frazadas, y demás mullidos elementos para hacer mas digno mi viaje), cuando mi humanidad escucho de nuevo el sonido de un cascabeleo siseante y sonoro, al mirar atrás reconocí el rostro de mi abatido enemigo (al que le había crecido de nuevo su cascabel) en medio del desorden mediático de maleteros, señoras, orientales desorientados, azafatas, niños y demás pasajeros de económica. Me levante un poco de mi amplio y facultado lugar de regocijo, y le giñe el ojo derecho con una habilidad y coquetería que el izquierdo no tiene, antes de que cerraran la cortina que separa dos clases tan odiosamente, como suele pasar en la vida.


Poscriptum:

.........................
1. La guarnición de los espaguetis tenia yague lo cual justifica el capitulo metamórfico de esta distinguida reunión.
2. Por razones de logística me abstuve de asistir de nuevo a cualquier evento social de índole privado que organizara este grupo de ser…viciales amigos.
3. Dedicado a la memoria del juguetón cascabel de Fiona, el cual cuelga aun en mi pecho como un trofeo de Victoria.
4. Las boas albinas están destinadas a que cualquier loca estúpida se las levante.

_________________________________
Imagen de Crotalus atrox tomada de: www.nationalgeographic.com/snake
Imagen de Bothrops colombiensis tomada de:
http://www.une.edu.ve/salud/mapanare/

Imagen P.E y Boa albina: http://news.bbc.co.uk/cbbcnews/hi/teachers/citizenship_11_14/subject_areas/globalisation_environmental/newsid_1780000/1780021.stm
Diseño: El suscrito, inspirado escuchando “Europa” de Mónica Naranjo

jueves, 19 de febrero de 2009

EXORCISANDO LA VERDAD: LAS FOTOS PORNO



En algún momento pensé, que sin más, llegaría este instante, en el que diría exactamente que fue lo que sucedió con el Tema de las Fotos porno del Sr. Potter, el suscrito, y Mr. JK, el principito. Y Que mejor momento que amparado en el efecto sosegado que deja el pasado San Valentín Day, para rendir excusas a quien las merece, expulsar diatribas e injurias a quien le corresponda, agradecer a quien se le debe, pero sobre todo, decir la verdad tal cual. (lectores, me excuso por lo extenso de la narrativa, pero era necesario).

Toda esta novela, y digo novela porque ni Delia Fiallo, ni Fernando Gaitán, ni Silvia Pinal, juntos podrían haber imaginado un trama lleno de Pasiones torrenciales, dolores amargos, esperanzas enternecedoras, amores furtivos, odios ciclónicos, jovialidades infantiles, tristezas profusas, agudas realidades, sorpresas bíblicas, melancolías míticas, pero sobretodo un final lleno de una Venganza con un ensañamiento vikingo.

Todo comienza cuando el suscrito, arrastraba un romance virtual, de esos romances que se alimentan poco a poco por msn, de a poco, en eventuales conversaciones de todo y nada a la vez. Esto llevaba, un tiempo prudencial, desde aquel momento en el cual por medio del portal de Gaydar, nuestros perfiles se embelesaron y se sedujeron con las escuetas imágenes, y unos extensos y descriptivos avatares en “acerca de mi”. Así pues, fue como Mr. JK y el Suscrito iniciaron ese filtreo electrónico, con lo impersonal de las letras escritas en tiempo real en los servicios de mensajería instantánea del msn. Para cuando nos escribíamos unos interminables e-mails como en un confesionario, el suscrito ya sostenía una relación afectiva estable con cerca de 8 meses de amor tangible con Mr.JP, esta relación se había basado en unas cordiales condiciones y basada en el respeto, y la verdad hay que decirla, Mr JP era un sol, no había queja alguna, pues en realidad todo marchaba muy bien. Pero yo tenía mi secreto cibernauta, el cual era un mito, una fantasía que se volvía real cuando su icono del msn decía –conectado-.

Hasta que un día, el suscrito fue seleccionado para dictar una conferencia sobre Búfalos en el marco del Simposio Internacional de Búfalos de las Américas y Europa, a celebrarse en la ciudad de Medellín a mediados de septiembre, si, en la ciudad de la Eterna primavera y espacio natal de mi secreto amante. El suscrito llego a Medellín, ansioso por la disertación pública y el encuentro con Mr. JK. Mientras Mr. JP auguraba sus mejores deseos en tal congreso de bufalistas, quien diría que mi juego de palabras en el inicio de mi despliegue conceptual sobre el uso de los búfalos como fuerza de trabajo, si, ese juego de palabras, seria en realidad mi futuro próximo. Pues dijé: “El futuro de la Ganadería es Negro” (haciendo referencia a que ese color como el ébano característico de los Búfalos, no tendría el mismo designio del refrán), pero el mío si lo fue, en los siguientes meses desde ese pronunciamiento en el Hotel Intercontinental.




El evento fue impecable, pero el encuentro con Mr. JK se había postergado, pues una premiación sorpresa del evento, catalogó al suscrito como el Mejor Investigador Joven, lo cual nos retraso un día más. Libre de todo compromiso, nos citamos en la Estación Niquia, estando yo, en el Hotel Nutibara (un fabuloso hotel, tradicional y ubicado justo en el corazón de la capital paisa) recorrí las 9 estaciones que nos separaban, esa noche era mágica, Medellín ostentaba un cielo limpio y azul oscuro, estrellado y con una redondísima luna amarilla. Ya en la estación, vi llegar a un hombre pequeño, delgado, con una sonrisa metálica bellísima, y vestido con una camisa de color lila con las mangas recogidas ¾ y el primer y segundo botón desabrochados dejando ver un tapizado de vellos suaves desde ese huequillo que se hace entre las dos clavículas y quien sabe hasta donde; era atrayente, demasiado atrayente, masculino, serio, ese hombrecito de mirada caída y una constante sonrisa amigable, esa sonrisa que actuara en mí como un imán, como una centrípeta, como un hoyo negro, es decir, como el anillo anal de un rapazuelo imberbe que aún sueña con el amor eterno…
Ahí estábamos, apretando nuestras manos por primera vez, dos hombres desconocidos físicamente, pero que sabíamos tanto el uno del otro por nuestras confesiones constantes. Sabia que su Papá vive en una ciudad del Caribe, que tiene dos perras llamadas Mechas y luna y son madre e hija y altamente prolíficas, que sus mujeres lo adoran y que a esta altura su hermanita ya debe ser toda una Medico, que ayudo en el parto de su tía y le dio “cosita” ver esa elongación vaginal, que no era cualquier brutico porque fue el mejor icfes y el mejor graduando de la U, que era alguien tranquilo, muy paciente, alegre, algo callado, muy buen amigo, buen novio, serio, responsable con sus cosas, que a veces era un poco malgeniado. Y el por su parte sabia lo propio del suscrito.

Tomamos solo un par de cervezas en un barcito al lado de la Estación, ahí sentados pude sentir que estaba al frente de un huracán tropical de sonrisas, a un arrebatador ciclón de gracia personal. Y medio callado, medio abrumado solo lograba admirar ese movimiento incesante de sus ojos al hablar, con ese desparpajo con el que los paisas hablan, con ese acento tan palatable, con ese arrastre de las “s”, ahí estaba un Caleño demostrando que esa rivalidad entre Cali y Medellín, era supuesta, no existía, o fue solo entre carteles de la muerte y el dolor.

Llego el momento mas delicioso de toda esta distancia, este silencio, cuando por primera vez sentí la piel de sus manos tocando las mías, por debajo de la mesa, acariciándolas, fue maravilloso, fue único. Un calor trepidante recorrió toda mi espalda, mi humanidad entera se sonrojo y mi verga se paró.
Luego vino la lluvia, para aderezar este momento único, yo seguía viendo a este sabroso paisa mas apetecible cada minuto, seguía disfrutando que me dijera “papasito” y yo diciéndole “Principito”, así fue como sobrevino el cierre de la primera noche juntos, besándonos con ímpetu, con pasión y desenfreno mientras la lluvia del Valle de aburra se deslizaba por nuestros rostros, haciéndonos probar el sudor, el sabor y la fuerza de dos hombres que se querían comer en medio de la calle, enfrente de todos, sin importar las miradas, el que dirán, y las consecuencias de tener a un Caleño besando con toda su fuerza a ese Paisa inquietante bajo ese cielo azul oscuro. Algunos aventajados en el tema de los besos aseguran que los besos míticos gay del Cine han sido entre Sarah Michelle Gellar y Selma Blair en “Crueles Intenciones”, y en “Brokeback Mountain”por Heath Ledger y Jake Gyllenhaal; pues la verdad no fueron siquiera la mitad de únicos como aquel legendario beso bajo la lluvia entre un Caleño y un Paisa. Esa noche nos separamos, y yo mojado hasta el ultimo de mis ciento ochenta y tres centímetros, regrese al hotel, con el alma en la boca, la verga palpitante y lubricada, y un sentimiento en el pecho, que aun no puedo definir como dolor o emoción, pero era parecido, a lo que se debe sentir cuando a alguien le aprietan el corazón para arrugarlo como una uva pasa.

En la mañana, estaba todo listo para vernos, el sentimiento de culpa desvanecido y justificado porque esa misma noche anterior, justo en esa noche mágica, en esa noche la cual el destino planeo de manera maquinada y estrictamente calculada, Mr. JP me confeso por medio de un mensaje de Voz en mi celular, el cual estaba adecuadamente apagado, me dijo en medio de una constante borrachera agravada por el consumo de alguna sustancia espirituosa: “…Acabo de tirar con otro tipo, y no me siento nada culpable, porque eres un Cabron que se cree mejor que todos..”. Al parecer sus buenos augurios no eran tan honestos, y más bien denotaban un dejo de insatisfacción profesional en una desigualdad sobredimensionada por nuestros performances individuales. Mis oídos no pudieron tener una mejor noticia, se estaba legitimando todos mis actos, bajo la premisa de que … (bla, bla, bla) ahhhh la verdad era que si Mr. JP era un sol, Mr. JK era el universo donde habían muchas galaxias y en una esquina ínfima existía un sol a medio brillar, ese era Mr. JP. La cosa, la química, la esencia, de Mr. JK era un algo que no podía contener, era demasiado irreal.

La tarde llego, y con ella Mr. JK y los besos no se hicieron esperar, las caricias estaban a la orden del día, esa tarde era esperada desde hacia mucho tiempo, ahí estaba con una camisa rosada, su sonrisa descrestantemente metálica y sus vellos corporales tentadores. Le dije: Tenia ganas de verte y tenerte junto a mi- y comencé a despojar sus ropas, acariciándole su pecho velludo, acercándome demasiado, para que ambos sintiéramos la respiración nerviosa del otro, deseábamos como nada besarnos, empiezo a acariciar su cara con una barba de 2 días, suave, con algunos pelos rojizos, marrones, rubios y castaños (a lo cual le hace merecedor el titulo de principito de colores), acarició su corto cabello castaño, suave con un delicado aroma a shampo de frutas cítricas, me acerco y le doy el mas caliente beso que le he dado a un caballero, siento como mi cuerpo despide calor, un calor que nos abraza y hace su vellos exuden su olor paisa, su olor a hombre, siento como las gotitas humedecen su cuerpo y veo como se estremece cuando aprieto hacia abajo su verga ya inflamada bajo su jean. Mientras intentaba desesperadamente de abarcar todo su cuerpo con mis manos, que aunque son grandes sabia que era imposible, le bese el cuello y sentí como un temblor recorrió todo su cuerpo, su pequeño cuerpo acobijado por mis fuertes brazos, conseguí con éxito que cada palmo de su piel fuera recorrido por mis copiosos besos y que se generaran pilo erecciones y estragos hormonales que no hacían si no dar cabida, a lo que seria el momento mas sensual de nuestras vidas.
Ahí tenia al paisa mas sexy del mundo para mi, en bóxer retorciéndose en cada beso, en cada caricia, y el decide abrir uno a uno, los cinco botones de mi jean, y descubre a mi verga, en una erección brutal, enormemente lubricada, la saca y yo arqueo mi espalda, y sentí como acercaba su rostro velludo a mi abdomen, y olía mi verga, olía mi sudor, saboreaba mi bolas, las acariciaba con ternura, con sus pequeñas manos. Luego sentí como posó sus labios sobre mi lubricada cabeza, estaba palpitante, humeante y de un rosado brillante por los jugos sexuales que esos apasionado besos habían generado. La chupó, recorrió su grosor, la saboreó y subió a darme un beso para compartir ese sabor a macho que disfrutaba en un silencio interrumpido solo por mis gemidos; de pie él era simplemente bello, masculino, era como si un lobo se irguiera sobre sus patas traseras y mostrara su bajo vientre velludo, castaño, era fascinante y morboso.

Cuando sus manos apretaban mi verga, yo sentía un desespero y llevaba mi manos a la cabeza, tratando de calmarme y tapando mi rostro para procurar oscuridad, para cegarme y solo sentir. Luego me la chupo mirándome directo a los ojos, con esos bellos y expresivos ojos, mirándome con una fuerza intrínseca, con pasión, con un parpadeo suave, sensual; el sentía que lo estaba deseando con todas mis fuerzas, el sabia que mi mirada le decía eso, entonces no aguante mas y lo levante por los brazos, lo bese, nuestras respiraciones se aceleraron, le bese de nuevo el cuello y el tenso todos sus músculos, fui bajando, bese su pecho, recorrí su abdomen, su ombligo velludo, mientras yo respiraba como un toro, sentía que mi pequeño amante separaba suavemente sus piernas, y me metí su verga, la trague toda, sentí sus vellos cortos y perfectamente rasurados, la chupé con mucho cuidado, juguetee con ella, el me hace saber el mucho placer que estaba sintiendo, su respiración era fuerte y profusa, sus manos me agarraban con fuerza y sentí que seguía abriendo sus piernas y suavemente las iba subiendo, poniendo a mi entera disposición su culo.

Y ahí estaba, era rosado, custodiado por remolinos de vellos castaños, pero justo en el culito, era libre de toda vellosidad, era como la perla que tanto aguarda la ostra, era del rosado mas sabroso, era como salmón, era exquisito, su color, su olor, su textura, suave, muy suave, tan suave como los parpados de un bebe recién nacido, era delicado, pequeño, apretado, era perfecto. Lo lamí, no recuerdo cuanto tiempo me perdí en medio de sus piernas, sus nalgas abiertas para mi, sus piernas sobre mis hombros, lo lamí con gran lujuria, el me hacia sentir lo excitado que estaba con sus movimientos retorciéndose de placer, escuchar sus gemidos y sus contorsiones me excitaba mas, mientras mas gemía mas le metía la lengua en su ya dilatado esfínter. Era suave, muy suave, seguí lamiéndolo de arriba hacia abajo, lo lamí de todas las formas posibles, lo abría con ayuda de sus manos y mis dedos índice, corazón y pulgares de ambas manos retraían sus adentros, para permitir a mi lengua llegar mas adentro, llegar a su suavidad eterna, a su sabor a macho, si, mi macho, mi paisa, mi principito de colores.

Me levante y le mostré la imponencia de mi verga en su mayor erección, era brutal, era magnifica, era toda suya, el la succiono con una increíble suavidad y susurro, quiero que me hagas tuyo, quiero que me hagas tuyo ahora, para siempre, quiero ser tuyo en este instante mágico; nos besamos y mientras colocaba un preservativo sobre mi férreo miembro, el sobaba sus dedos en su dilatado culo, y acaricia tan suave el trabajo fascinante de mi lengua en sus adentros. Ubique mi verga en sus nalgas abiertas, mientras el me miraba fijamente a los ojos, buscando mi atención, buscando mi mirada, la hinchada cabeza de mi verga, estaba justo en el rosado tesoro de mi amante, no hice un solo movimiento brusco, fue todo suave, muy suave, como la textura de su interior, ambos sentimos que este momento seria único, mi verga solo se asomaba a su interior, espere hasta que el mismo le diera permiso a mi apretada verga, que fuera el con su apertura mágica quien me dejara entrar y poseerlo, hacerlo mío, todo fue tan lento que podría jurar que llevaba la armonía de “my all” de Mariah Carey, suave, pues el lo merecía, no quería lastimar a mi pequeño principito de colores. Cuando su excitación creció, sentí como poco a poco , mi verga entraba, deslizándose, penetrándolo poco a poco, el no opuso resistencia alguna pues quería tenerme todo dentro de si, nos miramos a los ojos, nuestras humanidades jadeantes querían mas, querían estar cerca, querían ser uno solo, y así estábamos.
El era un excelso anfitrión, me abrazaba con su cálido interior, adhiriéndome a su suavidad, a su profundidad, yo no podía sentir mas que una enorme gratitud por tan hospitalario y pasional recibimiento.
Cada vez sentía que estaba mas adentro, el no podía verse mas vulnerable, mas frágil, mas inerme, mas indefenso con sus piernas abiertas a mas no poder, su mirada ansiosa, sus ojos brillantes a punto de estallar, y fue cuando en medio de un beso apasionado, mi vaivén se hacia mas intenso, mis estocadas eran mas intensas, sus expresiones gemidos y sonidos desgarrados eran de un placer infinito, cuando llevábamos un rato en la misma posición, en la cual podíamos vernos frente a frente, mis pies apoyados en el suelo frio de aquel motel, sentí como nuevamente mi amante temblaba, su piel se enrojeció y frunció el ceño, mirándome con pasión me dijo, voy a venirme, mientras mi verga se hinchaba aun mas, y penetraba sin control, sin escatimar fuerza, sentí las palpitaciones de su culo, la turgencia de su próstata contra el tronco de mi verga, las paredes de su culo en un espasmo increíble, sentí como el sudor que caía desde mi frente glorificaba la imagen de mi pequeño amante, admiré los tres chorros de semen se derramaban por su abdomen plano y velludo, ahí estaba temblando aun, cuando saque mi verga, dispare dos chorros generosos de semen, semen caliente, blanco, blanquísimo en su pecho, que llego hasta su cuello con mi verga roja, muy roja como si se fuera a reventar, y luego me desplomaba encima del cuerpo sudoroso de mi amante, ahí estábamos en medio de un abrazo eterno, de un beso prodigioso, de un momento de único valor sentimental. Acabábamos de tocar el cielo y no nos habíamos dado cuenta que afuera Medellín seguía su ritmo frenético, adentro, en ese cuarto de hotel seguíamos en un abrazo interminable, respirando la exhalación del otro y el tiempo detenido para los dos.

En ese sublime momento post-orgásmico, sentí que mi corazón reaccionaba de manera altiva, elegante, respondiendo con latidos fuertes y potentes, tal como el tropel de las patas de una caballada desbocada. Y esa fuerza terrible, esa que me permite superar todo, hasta la más abominable de las segregaciones y, por supuesto, el más delirante de los obstáculos, sentí que podía dejar todo y hacer mi vida junto a ese ser, y seguir en el camino que la Naturaleza me trazó, sentir, espiritualmente y sentimentalmente, la necesidad de un humano del mismo sexo. Y que ese caballero que yacía desnudo, untado de mis jugos, sudores y fluidos, que me miraba con una expresión de asombro, como si estuviese viendo una aparición divina. Después de un rato de silencio y besitos suaves y cariñosos, entramos en un sueño conjunto, mi mano se desprendió del todo de la Mr. JK al quedarme completamente dormido, el se volvió a verme como un animal fuerte, un toro bravo que de pronto sucumbe al cansancio y se queda allí, indefenso y bello en su brutalidad, despojado de su valentía y esa energía que lo embestía hacia unos minutos atrás.

Después de eso, disfrutamos de la compañía, de las sensaciones, de las risas, caminamos por Medellín, con la sonrisa mas amplia que cada uno podía profesar, fuimos a comer, hablamos de innumerables temas, nos deleitamos con las figuras del Maestro Botero, mientras un robusto capuchino en Juan Valdez nos alegraba la tarde, una tarde fresca, nos arropaba. Regresamos a nuestro espacio, esas paredes que aun exudaban nuestra pasión, las ventanas aun nubladas por los gemidos y suspiros, esta vez con mas calma disfrutamos cada beso y cada palmo del otro, nos retratamos haciendo todo, queríamos plasmar de manera traviesa esos besos, esas caricias y esa pasión, con mi cámara digital, posamos, reímos, nos excitamos, nos burlamos, disfrutamos de esa amateur sesión fotográfica.

Pero debía partir, separarme de mi principito, y esto fue lo mas difícil de todo, pues aunque quedaba una férrea intención, un compromiso, una promesa, una ilusión; todo esto era muy apresurado, pero ambos sabíamos que conocernos mas era necesario, era pertinente, pero debíamos esperar, debíamos tener calma, cuando todo había sido un afanoso y tórrido pasional encuentro debíamos arreglar algunas cosas de nuestras vidas para podernos recibir como una novedad maravillosa. Nos separamos en la misma estación donde me había deleitado al verlo por primera vez, ahí estaba tomándole la foto a la noche, a la estación con el corazón en la mano dispuesto a traérselo y entregárselo para que me lo guardara hasta que seguramente regresara, quería que el lo tuviera para que supiera lo que me hacia sentir el escuchar su voz, o simplemente verlo, era simplemente increíble, quería que lo supiera, quería que mi propio carnal corazón se lo dijera. Hubo lagrimas, no hay porque ocultarlas, pero fueron lagrimas de esperanza y gratitud, por darnos la muestra de la ambrosia, si ese alimento exclusivo de los dioses y deidades griegas que los hacia eternos, como eterno fue nuestro encuentro.

Mi regreso a Cali, me aguardaba un escabroso encuentro con Mr. JP y su novedad telefónica, pero también una noticia de un viaje al exterior de índole laboral y académico, que no esperaba. El asunto con Mr. JP fue manejado de la mejor y mas madura manera, el y su flamante nuevo amante-novio-levante-entuque estaban haciendo parte de la logística que se encargaba de mi despedida inesperada. Mientras tanto mis palabras y pensamientos se dirigían al Valle de aburra, donde el principito de colores me extrañaba montones, hablamos y nos queríamos a distancia.
En sus propias palabras Mr. JK expresaba lo que yo tanto quería escuchar: “…Sabes? vos cambiaste algunos esquemas que tenia en mi vida frente al hecho de conocer un man, y de las actitudes que yo normalmente tomo frente a ello…” proseguía con “en un segundo éramos los manes mas arrechos y excitados del mundo, haciendo cosas de locos, y al segundo siguiente estábamos inmersos en el mas suave y delicioso beso... no papacito es que vos definitivamente me flechaste de una forma inexplicable...” la verdad yo estaba tan ilusionado, que no me importaba nada, ni el viaje, ni la distancia, ni Medellín, ni Cali, ni nada.

En la fiesta de despedida lleve mi Laptop, para escuchar solo la música que me gustaba, y no esas imposiciones odiosas de mis amigos, que Selena, que Thalía, que Paulina, para ello re-ubique las carpetas de música en una sesión de invitado, para evitar que husmearán en mis documentos personales, específicamente en la muestra fotográfica de mi arrollador romance en Medellín, que se hacia cada vez mas tangible, por mi cara de guevon enamorado inevitable. Así fue como estarían a Salvo las fotos, pues ni el propio Michael Scolfield burlaría la seguridad de mi sesión privada, mis carpetas ocultas y demás secretos. El ágape tomo su rumbo, y ya entrado en tragos cerca de unos 5 o 6 Dry Martini´s, alguien dijo tener en su bandeja de entrada de su correo electrónico el estreno mundial del nuevo video de Madonna, a lo cual le impedía acceder pues mi cuenta de invitado no tenia acceso a internet, así que sin medir las consecuencias aperturé mi sesión personal, después el nuevo amigo de Mr. JP dijo que le permitiera revisar su correo para verificar la entrega de un Flayer publicitario que estaban corrigiendo como un trabajo de la universidad, para cuando me di cuenta de mi agotamiento físico, ya la celebración estaba en su declive, nos fuimos, y las fotos habían sido copiadas en una memoria u.s.b sin haberme dado cuenta, de tal acto delictivo.

Tres semanas después, la bomba estallo. La explosión en Hiroshima y Nagasaki eran simplemente una chispita mariposa en comparación, aquello tenía unas dimensiones apocalípticas. Llego a mi correo un mail con el asunto “Fotos de manes gay de Cali”, a lo cual abrí con una curiosidad malsana buscando reconocer algún asiduo asistente a Lulu Elektro, pero Señora Sorpresa, cuando vi una serie de 8 fotos como archivos adjuntos donde los protagonistas eran el suscrito y el principito de colores, mi reacción inmediata fue leer el mail emisario y los mail copias, mientras un frio escabroso, un frio polar recorría mis enrojecidas orejas y mis manos temblaban.
Mi mano, mi enorme mano derecha se posaba sobre mi rostro, el índice apoyado sobre la parte lateral del tabique, y los otros cuatro dedos recorriendo en bajada mi rostro mientras el centro de mi mano tapaba con fuerza mi boca. Estaba Aterrado, mientras leía los correos me daba cuenta que eran todos mis conocidos, mi prima en Holanda, mi primo en Bogotá, mi Director de Tesis en Palmira, mi mejor amigo en Miami, y cuanta loca en Cali, Chipichape y Yumbo (como dice la canción), había gente de todos lados, pero mi sorpresa se convirtió en Terror cuando leí, el mail de mi mamá.
El celular empezó a sonar, y cada que revisaba mi correo encontraba mas y mas mail sobre lo mismo, mi sospecha inicial dejaba al principito de colores en un vasallo en blanco y negro, pensaba que él había desatado esta campaña publicitaria del terror. Seguí buscando y preguntándome que había pasado, que había hecho mal, porque el principito me hacia algo así, bueno el mismo se haría daño. Entonces me llamó mi anterior Ex, que precedió a Mr. JP, el agraciado Mr. O, y me dijo: “Ve mk, acabo de ver tus fotos y estoy en Shock, ósea, están buenísimas pero que boleta”, yo callado, con pena, con una vergüenza católica, musite, quien te las mando, y me dijo: “No, estoy en el Chat de Caliescali, y una loca nickeada PAPARAZZIXXX las esta re-enviando solo le das tu mail y te las manda”, agrego, mientras yo trabaja entero y respiraba profundo, sudoroso y preocupado, recuerdo perfectamente que me temblaba demasiado la pierna derecha, pues estaba apoyado con el pie empinado, y el temblor era incontenible. “porque no entras le acabo de preguntar si tiene mas, y solo respondió que si yo los conocía, le dije que no, pero entra vos” dijo Mr. O.
Cuando comprobé que Mr. O, no me mentía y comprobé que el no era el Nick emisor, procedí a entablar la conversación con el sujeto, que termino contándome luego de muchas preguntas de mi parte, que a el solo le habían encomendado la labor, que me las enviaba y que me daría cuenta de lo que le decía si veía el cuerpo de los Forward, me dijo: “parce, la verdad solo me pagan por enviarlas, ni siquiera soy gay, solo que un man que viene a veces a este ciber café, me dijo que me pagaba si mandaba a por lo menos 500 persona desde un chat gay me explico como acceder y que decir, y que cada que llevara 100 mails, le enviara una copia, y por eso me gano 200 lucas, al terminar los 500”. Simplemente no le creí.
Cuando revise de nuevo tanto el mail de Mr. O, como el de este supuesto Paparazzi criollo, corrobore un mail recurrente en la lista interminable de locas en los re-envíos, ahí estaba, oculto en las copias incesantes, el mail de mi ex, el mail de Mr. JP.
Con calma, determine como habían podido pasar los hechos, como se vulneró la seguridad de las fotos, logré entender que los correos a los que fue enviado por primera vez las fotos, eran sin duda una copia obtenida desde los re-envíos masivos de tonterías sobre Dios, los pactos religiosos que hay que enviar a mas de 10 personas si no te quemaras en el infierno y esas cosas que enviaba al grupo “Amigos y Familia” desde mi organizada lista de contactos, era concluyente, solo alguien como Mr. JP tendría acceso a eso, y solo alguien como él, tendría la sangre tan fría para hacer algo así. Por mi parte estaba cagado y con el agua lejos.

Muchas fueron las llamadas al celular y al fijo, los mensajes de texto, los mensajes en el hi5, en el facebook, las miradas cómplices de la cantidad ingente de maricas en las cajas registradoras del Éxito y en la Casa del Arte (un barcito gay de Cali, que es un caldo de cultivo de los peores venenos neurotóxicos existentes en la Sultana del Valle), que estaban ante si, a su propio porno star caleño. Algunos mail solicitaban una cotización de nuestros honorarios profesionales pornográficos, otros preguntaban si éramos pre-pago, que si participábamos en actividades swigeristicas, otros insultaban nuestro buen nombre con toda clase de adjetivos denotativos, por supuesto la legión de amigas lesbianas mal nutridas, y la caterva de incompetentes de amigos de Mr. JP eran quienes dejaban saber su inconformidad, su ira desmedida y su asco mediático, por faltar al honor y buen nombre de su compañero, de aquella escuálida hiena, si, esa hiena pecosa de mirada negra y penetrante sedienta de venganza en la que se había convertido Mr. JP.
Como ya supondrán hice las delicias de mis enemigos (íntimos o no), de mis mas acérrimos detractores, de algunos de mis amigos y hasta de mis vecinos al suponer que compartían zona de habitación, de rumba, o de compartir social, con un engendro de los siete infiernos que no saludaba, no regalaba dulces a los niños, no prendía velas el 7 de diciembre, que carecía del Cigomático mayor y tenia el Risorio de Santorini nadando en Botox, lo que le impiden regalar una sonrisa de piedad cuando salía a trabajar, a rumbear, o cuando fuera y donde fuera.





Todo esto gracias a esa sobre-exposición manipulada inicialmente pero que tomo rumbos increíbles, de la vulnerabilidad de la privacidad, de la intimidad. Sobre todo, cuando el mail llego a manos de un estudiante resentido de izquierda de la Universidad, y al que el suscrito le había hecho la vida imposible en su rol de Monitor académico, y con el cual fui cruel, desalmado y no quise comérmelo por el simple sabor que dejaba la micro física del poder, ahora la vida me pasaba factura, y el mencionado cambió el “asunto” del mail por: Ex estudiante de Zootecnia de la Universidad Nacional”, solo le falto dar mi numero de tarjeta profesional, celular y dirección postal. Fui el asunto social mas mencionado en la Asociación de Zootecnistas a la cual pertenecía, y por la cual fui expulsado, según el oficio A001D donde por normas morales y de conducta, mi calidad de socio era inaceptable y por tanto dirimida. Pero también sé que el Director y el coordinador regional seguro se masturbaron mientras veían las dichosas razones por las cuales me expulsaron, en un comité, en los cuales suelen succionarse los escrotos todos los martes durante la tarde, mientras sus esposas los esperan en casa con los brazos abiertos y un beso acogedor.

El suscrito daría lo que fuera, para que los señores lectores hubieran visto la tonalidad de colores que se posaron sobre la cara de quien les escribe, tonalidades desde el rojo pasión hasta el morado ilusión, pasando por el naranja, amarillo, verde y azul; cuando la autora de mis días y su útero prodigioso, llamaron de un grito a su hijo mayor en un desgarro armónico, como poseída por La Lupe en una noche en la Red. y Dijo: ¿ Acabo de ver unas fotos tuyas de un calibre... (Pensó, para continuar 3 segundos después)..., es decir, acab... me... (tartamudeo, y descargo su asombro en un palabreo rápido y tajante)... me acaba de mandar Teresita, un mail diciendo: si fuera mi hijo, "creo q harías lo propio enviándomelas, un abrazo", léelo (y efectivamente la Teresa esa, sin diminutivos, había escrito eso). Hijo, por Dios, como llego esas fotos a mano de Teresita? (y ni le mencione a cuantos contactos mas, conocía mi madre en ese correo); y en el mail de Mr. JP diciéndome: “ahí tiene a su hijo, el que fue mi novio desde hoy”.

Un frio bordeo todo mi amigable, mullido y suave escroto, cuando tuve que responder, con una seguridad impropia, con un talento improvisativo (que Gilberto Santa Rosa era un pelele a mi lado), dije: "Mama (alargando esta ultima vocal abierta), son simplemente unas fotos privadas que dejaron de serlo por una mala intención, haciendo lo que todo el mundo hace en su intimidad".

-Si, mi amor. Pero uno no se toma fotos y menos haciéndole las cosas que le estas haciendo a ese pobre muchachito. - Concluyo, mientras apagaba el PC y se iba a la Sala a servirse un Vodka (el Vodka de la tarde, el que siempre le he criticado, pues es muy seco para este trópico infernal), cuando le di la espalda dijo: anda, lavate las manos y nos tomamos un trago y hablamos de lo que pasó.
( Jajaja, me reí, de solo pensar que ella había dicho eso, y que esa frase haría historia entre mis amigos)


Los archivos seleccionados por Mr. JP. y su mozalbete conspicuo del mal, fueron ocho (8), ocho de un total de 53 fotos, entre las cuales hay que reconocer el buen tino, aunque no nos benefician del todo, y paso a dar una breve descripción de lo que generó ese escozor en la azucarada capital del Valle del Cauca y sus demás horizontes:
1) Plano abierto de la sinergia entre la sonrisa metalica de la tierra de las “s” y la de este pecho. El cual se encuentra adherido desde atrás al pecho multicolor, ambos sin camisa y en jean.
2) Plano Normal de un lateral de los apasionados besos descritos con escueto detalle, pero que eran simplemente irremplazables, una muestra de uno "andeneado"
3) Primer Plano en contrapicada del suscrito succionando la mas rosada tetilla que su humanidad ha conocido, al fondo rostro satisfecho de paisa encantador
4) Plano en picada succion profusa y contundente de miembro caleño, grueso, levantao´a punta de chontaduro y pandebono
5) Primerisimo plano en nadir de ambos miembros, el blanquisimo paisa y el canela valluno
6) Plano cenital de mirada penetrante con felacion paisa, y su languido y velludo pero supremo y exquisito
7) Plano normal de un tacto a la suavidad interna de mi principito de colores
8) Primer plano del embate forajudo del suscrito contra el agraciado paisa de mil colores.

El encuentro con Mr. JP debía darse, no sabia donde, cuando ni como; pero ahí estábamos, yo, subiendo las escaleras de la Discoteca una agraciada noche, el, bajándolas con un aire triunfante, pues ya sabia de mi presencia en el lugar, y lo tome de su ahora bulímico brazo derecho apretándole con fuerza y mirándolo a los ojos, le dije:

-Oye Gracias, siempre espere de ti lo mejor, los mejores besos, los mejores polvos y no por menos, la mejor traición- inicié, sin soltar su famélico brazo.
- Me lastimas, suéltame por favor- replico
- Te voy a soltar, cuando se me de la gana, pero mejor sonríe para que tu fanaticada que viene atrás de ti, no se preocupen- dije, la verdad con una voz áspera por la ira. - Solo quiero que me escuches lo siguiente, ya que tu te cagaste y con un esfuerzo senil, sobre todo lo que sabias de mi, te sugiero por el bienestar de tu descarnada existencia, nunca atravesarte ni de broma por mi camino, ni en broma, y te estoy hablando en serio, o acaso me ves una sonrisa en la cara?- Culmine soltando aquel brazo exiguo, que agarro un poco de color justo en las marcas que dejaron mis 5 dedos.
-Tu te logras imaginar lo mucho que sufrí cuando vi tus fotos? - Preguntó, arreglándose el cabello.
- ajam- musité
-Pues si sufrí mucho, aunque no lo creas, ver a mi hombre, al que todos decían que era perfecto, del que nadie pensaría una cosa semejante, verlo culiando con otro man, es intolerable- y dijo, casi profetando a el Guason de Head. -"Creo que todo lo que no mata simplemente te hace extraño" y tu siempre me has dicho que "En lo extraño, siempre habrá una fascinación mórbida".

La encuentro había acabado sin mas, fue mucho menos terapéutico de lo que pensé, pero en realidad, era eso. Un encuentro mas con alguien del pasado, de un avinagrado pasado. Ahí estaba, llevado por una delgadez social, junto a ese grupete de niños sacados de una peli de Tim burton, mirándome y riendose a mas no poder, pero seguro que su tristeza era mas sonora que su Carcajada Final. Pero fue hasta que hizo una seña de tomar una foto con una cámara imaginaria en sus manos, cuando… me acerque (y escuche tararear a mi conciencia I Was Made For Loving You de Kiss, mientras caminaba hacia él) y con la trayectoria, velocidad, fuerza de rozamiento y cadencia de una cachetada, pero con la mano empuñada sacudí su vida. El golpe le hizo pensar que le había roto los dientes y se convirtió en eco veloz e insoportable que le subía por la nariz hasta sacudirle la cabeza. La lata de RedBull salió disparada de sus manos y recuerdo el liquido amarrillo esparciéndose en su camiseta diesel de temporada, y sobre ese duro, gris y frio concreto de las calles del Exclusivo sector de Granada. Con una mano protegió su mejilla y con la otra se cercioró que su peinado con cera hubiera resistido el inesperado embate. Ahora si, si, ahora si sentía que todo había quedado saldado, la pena, la cara de mi mama, el asombro de mis amigos, el deleite de mis enemigos, el placebo de los desconocidos, pero sobre todo el honor del principito de colores, que bajo ningún concepto merecía pasar por esto, así ni llegara a saber a fondo la verdad.
- Es cierto, lo que no te mata te hace extraño-. Dije con la voz afectada por la adrenalina y el tarareo incesante de la canción de Kiss.
- Gracias por destruir mi vida y humillarme enfrente de todo el mundo- Respondió Mr. JP, con la voz cansada, pastosa y nicotínica de siempre, mientras desaprecia en medio de un circulo de locas famélicas vestidas y peinadas igual..

Cuando la cadencia de las ahora publicas fotos, se iba extendiendo a interminables nuevos rumbos, mucho se dijo sobre el suscrito y su acompañante grafico, entre el circulo de mis “allegados” y las hienas, se dijo que era un morboso desmedido (cándida fabula), que era pre-pago (mito inocente), que era mal polvo (poesía barata), que me venía rápido y poquito (leyenda urbana), que me las daba de macho y era una hembrita en la cama (novela venezolana), que era egoísta, caprichoso y pocas veces cariñoso (canción de la salsera India), que era un 3HP (Fantasía adolescente), que nos habían pagado por las fotos (Película de Disney), que las fotos estaban retocadas (Capitulo de padres e hijos), que habían fotos haciendo lluvia dorada (Trova cubana), que las fotos eran asquerosas (ahí si se les fueron las luces!!!); en fin una larga lista de hipótesis afirmativas que no dejaban si no en una evidencia categórica que ya no podía hacer nada, que en vez de acabar con migo me había hecho un favor... Aun así, baje la cabeza, hice silencio, y acepte un trabajo en el extranjero exiliándome en la distancia de mi familia, de mis “amigos”, de mis errores, de mi país y sobre todo del principito.


Me despido de Ustedes (por fin) escuchando a Damián Rice, y su romántica “Blower’s daugther” y al Mega hembro de Michael Bubble con “Dream a Little Dream” para que sepan qué es en realidad sufrir y reponerse correctamente, en su orden respectivo.

lunes, 2 de febrero de 2009

El descubrimiento de la voz del Desamor

En una día gris, de esos grises mortuorios, esos grises eclesiásticos sin vida y sin animo de nada, de esos que suelen darse en los pseudo-inviernos pluviales tropicales, un día gris de Octubre del 2007 en Cali, me había dado a la copiosa tarea de iniciar a ver los impecables trabajos de Almodóvar en el orden cronológico del estreno, desde 1980 a 1988 -pues eran las consabidas películas que me faltaban, en su orden Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón (1980); Laberinto de pasiones (1982); Entre tinieblas (1983); ¿Qué he hecho yo para merecer esto? (1984); Matador (1986); La ley del deseo (1987) y por ultimo Mujeres al borde de un ataque de nervios (1988)-. Una película cada tarde, cada tarde gris, donde cada día mas, me acercaba por ese naturalismo inherente de Almodóvar que trasgrede el costumbrismo del cine de habla hispana, y me acercaba sin saber al momento que me daría la mejor (o la peor?) herramienta para drenar mis tristezas y mas profundas depresiones.

Así fue cuando después de padecer los 5280 segundos de la búsqueda de Iván por Pepa, Lucia y Candela en Mujeres al Borde de un ataque de Nervios, sucedió lo inesperado, lo fortuito, lo súbito, lo mas espontaneo… el desgarro armónico de una lirica poco mesurada y sosegada, todo esto mientras los créditos de la película danzaban sin ser al menos percatados, pues mi concentración focalizaba la letra de PURO TEATRO, el cual no era un bolero mas, era EL BOLERO.
“Igual que en un escenario Finges tu dolor barato
Tu drama no es necesario Yo conozco ese teatro
Fingiendo Que bien te queda el papel
Después de todo parece que esa es tu forma de ser.
yo confiaba ciegamente en la fiebre de tus besos,
mentiste serenamente y el telón cayó por eso.
Teatro Lo tuyo es puro teatro,
Falsedad bien ensayada Estudiado simulacro,
Fue tu mejor actuación Destrozar mi corazón.
Y hoy que me lloras de veras Recuerdo tu simulacro
Perdona que no te crea Me parece que es teatro”
Puro Teatro: Tite Curet Alonso


Pero quien Diablos era esa Deidad ufana y agresiva, que con un estilo trepidante, visceral y descarado rasguñaba los tonos mas mediáticos y teatrales que su descollante garganta en un intento corajudo, de mediar como antídoto para cerrar (o abrir de nuevo para volver a cerrar) profundas y sangrientas heridas en los corazones atropellados, accidentados y desdichados de este mundo marginal de amantes de luchas intestinas…??? y el secreto para mi fue develado, era nada mas y nada menos, que La Lupe.


Pero aun no sabia quien era la susodicha, de donde había salido esa alma adolorida; para lo cual recurrí a la ciber-autopista de la información, libros, LP´s guardados de mis abuelos, y hasta visite en diciembre del 2007, el encuentro de melómanos salseros en el marco de la Feria de Cali. Y entonces mi duda fue formando un concepto, una mera opinión, un rumor, un atisbo de la verdad: La Lupe era el propio arte barroco hecho mujer, dolor, dinamismo, decoloración y un poco de locura.
No era una cantante, es una leyenda. Una leyenda que huyo de Cuba, porque Fidel y ella arrancaban su carrera vertiginosa y exitosa al mismo tiempo, ella y su extravagante estilo cabaretero, con una digresión escénica inmoral no encajaban ya que contrariaban el afán atolondrado de la represión totalitaria del régimen dictatorial que lideraba el comandante en jefe.

Pero antes de irse de la Isla, los más grandes pensadores y escritores de la década de los 60´s se dejaron embrujar por la cantante. Pablo Picasso le dijo susurrándole a un rostro sudado y agitado por el eclepticismo demoniaco caribeño al bajar del Escenario “Eres un Genio”; Jean Paul Sartre se levanto de su silla y grito: “animal musical”, cuando la Lupe arremetía a golpes con sus tacones de 10 cm el timbal y al mismo timbalero, poseída por un impúdico frenesí pasional de despecho y dolor; El gesto de aprobación y asombro de una demudada Simone de Beauvoir ante el despojo ciclónico demencial y excitante de las pestañas postizas, los aretes, la peluca, los zapatos y hasta los sostenes que fueron a dar a las piernas de la ferviente feminista francesa, y que no supo que decir ante el espectáculo marginal, teatral y excéntrico de una mujer que retorcía el alma ante el dolor, el drama y la furia, y que enaltecía el rol de la mujer como nunca nadie mas pudo (ni podrá) lograr, y recobrando el suspiro en el desahogo de sus pasiones con una sonrisa amplia y traviesa, mientras acomodaba sus tetas aferrándola con las larguísimas uñas rojas, si, rojas como su sangre caliente.
Tennessee Williams, dramaturgo homosexual americano pasó también por el club nocturno la Red, ubicado en la Habana, donde en una noche mágica quedo deslumbrado al ver como detrás de una cortina de humo una figura serpenteante, picara, impúdica y un prototipo fatal de anti-diva develaba toda su gracia personal arropada por una arrolladora forma de liberar tensiones y desamores. Su presencia en el escenario fue propicia (y podría ser concluyente al afirmar de manera categórica que Tennessee, capitalizo ese estilo telúrico de La Lupe) para imprimir a sus tan elaborados personajes de sus dramas teatrales, la intensidad y riqueza potencial necesaria.

Un original estilo de interpretación que combina carcajadas, llanto, gritos y movimientos corporales desmedidos y sexuales con desprendimientos violentos de prendas de vestir como los zapatos que utilizaba para golpear al pianista acompañante de su orquesta. Eso es La Lupe, eso y mucho mas. Uno de los relatos vividos de un encuentro con La Lupe que mas me llamó la atención en todo lo que encontré fue el de la investigadora Socióloga Daysi Cue Fernández quien en 1961, era una estudiante de sociología de la Universidad de Oriente, que llegaba a La Habana con sus compañeros, a propósito de una exposición:

“Por la noche, aprovechábamos para recorrer la ciudad, en una de esas
salidas por El Vedado, fuimos a dar, ya en la madrugada, a La Red. En aquel momento, La Lupe era la estrella del lugar. Casualmente iba en el grupo, un muchacho que había sido su compañero de estudios de la Escuela Normal de Santiago, y la Lupe se sentó con nosotros en la mesa. Me llamó la atención que la conversación de ella era la de una persona educada, culta, no lo que uno se podía imaginar viéndola actuar. Era muy correcta, al menos lo fue ese día, y no me pareció una mujer vulgar. Cuando empezaba a actuar se transformaba y todo lo que se dice es verdad: se pellizcaba, se mordía… desbarataba el mundo; pero lo hacía con una sinceridad que no te daba la impresión de que era una pose de escena. No me pareció nada impostado, o una imagen que se tratara de vender. Ella sentía así, y así lo manifestaba. El cabaret se llenaba, porque a todo el mundo le interesaba verla, era un espectáculo. La Lupe era un torbellino. Creo que tiene que haber existido muy buena identificación entre ella y los músicos, para soportar todo aquello. Lupe iba contra todos los cánones del período. La Lupe contagiaba y es una artista irrepetible.”
Tomado de:Pasión y reto de La Lupe. JOSE ANTONIO EVORA. El Nuevo Herald. disponible en Web: http://www.alocubano.com/lupe.htm


Después de sentir que fue simplemente el destino quien me puso a la Lupe, para cambiar mis penas y desgracias en celebraciones al desamor, con canciones como PURO TEATRO y La fascinante QUE TE PEDI, pues he decretado que en cada reunión, agasajo, celebración, homenaje, obsequio, fiesta, convite, ágape, invitación, lisonja, regalo, presente, mimo, halago, fineza, atención, delicadeza en pro del desamor, desafecto, aversión, aborrecimiento, odio, antipatía, o animadversión que deja estos afanes del amor entre hombres; se debe servir un buen vino tinto (algo calientico como me gusta) y una apropiada y generosa tabla de quesos (de cabra, si de cabras locas como la misma Lupe) y escuchar en Silencio (pero el alma gritando, tarareando y/o cantando a lo que da) este par de piezas musicales de la mejor de las únicas cuatro mujeres del universo que dominan el arte nervioso: LA LUPE.



Imagenes Tomadas de:

*Pasión y reto de La Lupe. Por J. A. Evora. El Nuevo Herald.

*La Lupe y Celia, caras distintas de la misma gloria. Por Jaime A. Porcell

todas disponibles en Web: http://www.alocubano.com/lupe.htm